
La llegada de impresionantes récords al panorama atlético a propósito de los Juegos Olímpicos de Tokio, a puesto en la palestra el debate en relación a las ventajas que puede estar otorgando a algunos deportistas el uso de un determinado tipo de zapatillas para sus evoluciones competitivas, y si la Federación internacional debiera poner su mano interventora para detener la escalada del problema.
Importantes marcas del ecosistema deportivo global como Nike, New Balance o Puma han introducido mejoras tecnológicas en la fabricación de ciertos modelos de calzado que según el criterio de renombrados especialistas en biomecánica pudieran llegar a desvirtuar la legitimidad del llamado deporte rey.
Las primeras alarmas surgieron a colación de los juegos de Rio de Janeiro producto a los triunfos conseguidos por atletas de maratón en aquella cita, pero han cobrado nuevos bríos recientemente. El batimiento a partir del 2019 de las cotas universales en los 5000 y 10000 metros tanto en hombres como entre mujeres, algunos resultados de los Trials de Estados Unidos en este 2021, y los destrozos propinados a legendarias marcas en los 400 metros con vallas durante los juegos de Tokio, han terminado por encender la problemática ante los ojos de los seguidores del atletismo.
El atletismo de Tokio asombró al mundo.
El noruego Karsten Warholm rompió por casi un segundo de margen el registro olímpico que había perdurado por 29 años en la vuelta al óvalo con vallas. La carrera la dominó el nórdico pero también el segundo y tercero en cruzar a la meta quedaron por debajo del anterior récord del mundo. El mismo evento pero entre mujeres tuvo a la estadounidense Sydney Mc Laughlin como ganadora. La norteamericana estampó un crono mejor en mas de un segundo a la anterior marca olímpica ,que llevaba 13 años de antigüedad. El tiempo realizado en esa carrera mejoró en casi medio segundo al récord mundial que ella misma había logrado en los clasificatorios de su país para los Juegos Olímpicos.
Si no existieran ya suficientes elementos para fundamentar la sospecha se podría aportar también el récord olímpico conseguido en los 100 metros planos para féminas por la jamaicana Elaine Thompson. La anterior marca del hectómetro llevaba vigente la friolera de 33 temporadas.

Las marcas dueñas de las Super zapatillas
La carrera por elevar la sofisticación tecnológica de las zapatillas la lidera Nike, que explotó primero la innovación con su modelo Vaporfly para carreras de largo aliento, y después ya en el 2020 introdujo su modelo Superspike para carreras más veloces.
Tanto un modelo como el otro utilizan tecnología que combina el uso de una placa rígida de nylon o fibra de carbono, con espuma de goma acolchada. Las espumas, que incluyen materiales como el PEBA (Polyether Block Amide) , o TPU (poliuretano termoplástico), hacen que los calzados sean más livianos y más resistentes. Igualmente las super zapatillas logran recuperar su forma muy rápidamente después de comprimirse en la pisada, devolviendo además gran parte de la energía que se usó para comprimirlas.
Las variantes de Nike son las más usadas aunque ya otras marcas han introducido variaciones tecnológicas a sus modelos de alta competencia, las que se atemperan con las mejoras logradas por la marca estadounidense del bastón. A la estela innovadora de Nike entró la marca alemana Puma, responsable del calzado del noruego Warholm.
El nórdico después de estampar su asombroso crono en la final de Tokio, arremetió verbalmente contra su rival estadounidense en la carrera acusándolo de usar los Superspike de Nike. Un poco después en la misma conferencia , el ya campeón olímpico tuvo que reconocer que sus Pumas llevaban también un detalle de alta tecnología. Sus zapatillas llevaban una lámina de carbono desarrollada en conjunto con ingenieros de la escudería Mersedes Benz de la Formula 1 .

Las leyendas del atletismo opinan sobre las Super zapatillas
La polémica ha sido llevada a los principales medios de difusión norteamericanos, y en uno de ellos se le pidió opinión a Michael Jhonson , otrora campeón olímpico de 200 y 400 metros planos. El “Pato”, como se le conoce, no creyó que el uso de las Super zapatillas fuera el responsable directo de la llegada de grandes y recientes marcas.
Su opinión por supuesto que está suficientemente autorizada, pero quizás esté sesgada de alguna por el compromiso comercial que todavía tendría el actual comentarista de Tv con alguna de las más importantes franquicias productoras de indumentaria deportiva. Además sus récords ya no están en peligro, pues todos las marcas que dejó Jonhson fueron batidas hace tiempo.
Así mismo, una posición diametralmente opuesta la adopta Usain Bolt. El jamaicano actual recordista mundial y olímpico de los 100 y 200 metros, sí achaca al uso de las Super Spike de Nike, y otros modelos similares, la profusión de grandes tiempos de los últimos tres años. En una entrevista con el periódico británico ‘The Guardian’ afirmó que si hubiera usado zapatillas con tecnología hubiese sido “mucho más rápido” y que incluso habría completado los 100 metros “por debajo de 9.5 segundos. Seguro. Sin duda. Es extraño e injusto para muchos atletas porque sé que en el pasado (los fabricantes) lo intentaron pero el organismo rector dijo: No, no se puede».

¿Y que dice el organismo que rige al Atletismo?
La World Atletic, en la figura de su presidente, el inglés Sebastian Coe , no cree que sea este un problema que preocupe. A propósito de Tokio dijo: «Estoy viendo a atletas realmente talentosos que probablemente corren más rápido en superficies rápidas. Desde que tengo memoria, hemos hablado sobre pistas que son rápidas y pistas que no lo son». El federativo agregó refiriéndose al noruego recordman : «Warholm está corriendo rápido, pero siempre hemos sabido que corre rápido y probablemente corre un poco más rápido en esta pista». «Creo que estamos en un mundo de innovación. No quiero atajar la innovación que los fabricantes de zapatillas están logrando”.
Si se mira una tabla de referencia emitida por la máxima institución atlética internacional y que se usa para comparar la magnitud de cada una de las marcas mundiales dentro del deporte, tenemos que el récord de 45 segundos y 94 centésimas de Warholm en 400 metros con vallas, solo queda relegado por el valor de los registros de Usain Bolt en los 100 y los 200 metros lisos. El resto de los actuales récords quedan rebasados ampliamente por el inaudito crono del noruego. Por poner solo un ejemplo usemos el mejor tiempo de los 110 con vallas entre hombres como referencia. La marca del escandinavo equivale a un 12 segundos y 56 centésimas , siendo la cota actual de esa modalidad una inabordable 12,80 segundos ,y fue lograda hace 9 años.

El Deporte Rey ama a las marcas
Es sabida la estrecha relación, y casi dependencia, que existe entre el Atletismo y las grandes marcas como Adidas, Nike, Reebok o Puma. Uno sostiene a los otros, y viceversa. Entonces puede explicarse la tibieza del máximo directivo a la hora de analizar con mayor firmeza el asunto, y tomar las medidas que el caso amerita. Sebastian Coe en el futuro tendrá inevitablemente que hacerlo si quiere preservar la salud de su apreciado deporte.
La sofisticación de las zapatillas es un hecho que mejora el rendimiento de los atletas, y a ese tipo de modernidades siempre van a acceder más rápido los atletas que cuenten con un sponsor o patrocinador potente. Los de menos recursos podrán disponer de los adelantos, pero siempre a destiempo, y en riesgo de volver a quedar atrasados ante el advenimiento de la siguiente innovación.
Que en una competencia las opciones de sobresalir de cada uno de los aspirantes sean parejas, es uno de los principios básicos y naturales en los que se basa el deporte.
En esa justa línea deberá correr siempre World Atletic, y tratando además de ganarle permanentemente a los que pretendan sacar ventaja.